La marimba me ayuda a desnudarme, a ser yo: Emiliano Sandoval

Por Jorge Luis Heredia

Este artículo, publicado en el primer trimestre de 2020, fue rescatado por el autor para darle vida en este blog: Fin de Semana.

Me llama la atención uno de los conciertos de Emiliano. Al fondo la avenida José María Chávez, una marcha de estudiantes de Cañada Honda y la patrulla que guía el tráfico sin el menor pudor con la torreta encendida. Unos metros atrás, a un costado del Palacio de gobierno, una bocina a todo volumen suelta sin pudor El listón de su pelo, unos gritos más allá se evaporan, mientras que la marimba de Emiliano Sandoval de a poco se expande con sus propias composiciones y con obras de otros grandes compositores del mundo.

Emiliano Sandoval. Aguascalientes hecho de música.

El río de gente atraviesa el pasillo sin mirar siquiera, sin escuchar, sin darse cuenta de que lo que hace Emiliano no es improvisado. El músico pasa horas y horas frente a su Marimba electrónica y lo que trae a la plaza, frente al reloj de sol, es un concierto en el que entrega su alma. La tarde es fresca, pero Emiliano suda a chorros y los sancudos se lo comen, pero igual, es un profesional que se entrega como si estuviera en el mejor escenario del mundo. Es una danza infinita de notas que no huelen a la marimba tradicional de Chiapas, más bien tiene un sabor de aquí, de Aguascalientes, de los sueños de Emiliano, de los años y años que ha dedicado a la música. De a poco los asientos se van ocupando y llegan los aplausos.

Y uno se pregunta si el mercado de Aguascalientes es el mercado ideal de un músico de la talla de Emiliano, y no, quizás no, pero no por el público que es pasional y entregado, es más bien por una institución cultural que parece haberse empeñado en bloquearlo a toda costa. Emiliano no quiere dar nombres para que no manchar el nombre de su abuelo, pero el hecho es que está en la congeladora. “No creo que un periodicazo sea el camino para hablar del funcionario que me bloqueó”, dice, ante la insistencia para que narre la historia en la grabadora. Es como si Emiliano no supiera del inmenso poder de los artistas, y no quiere incomodar a la institución que lo ha bloqueado, por ahora cuando menos. De cualquier manera, es más grande su música que ese bloqueo, es más grande su interpretación, es más grande su empeño por subir a Aguascalientes en el ranking de los estados hechos de música, por eso la entrevista.

 

En una de tus participaciones, vi que el espacio no era el más adecuado. Los ríos de gente pasando por los lados, el ruido de los camiones, y aun así tocas en plena calle, ¿Por qué, para qué?

Pues mira, resulta interesante la pregunta porque siempre deambula por mi mente ese tipo de cosas, preocupado por el producto musical, a fin de cuentas. Ahora me encuentro en un momento de mi vida en el que aprovecho las oportunidades y esas son las oportunidades que de alguna manera encuentro o me llegan. No estoy en posición de dejar pasar oportunidades así, entiendo que hay muchas circunstancias que podrían impedir que se aprecie un concierto de esa naturaleza, pero a fin de cuentas uno hace su mejor esfuerzo por presentarse y para que a la gente le agrade. Qué mejor que sea en un recinto adecuado, pero si es la oportunidad, pues la tomo, por las circunstancias en las que me encuentro.

 

¿Es Aguascalientes el mercado adecuado para ti?

Pues curiosamente he encontrado un lugar aquí en el que se aprecia mi trabajo, porque honestamente yo no encontraba lugares en donde me pudieran programar y de alguna manera si le quiero agradecer a ciertas personas, al Instituto Municipal Aguascalentense, y al ICA en su momento, por darme la oportunidad, pero bueno, es estar tocando la puerta hasta que se dé la oportunidad.

 

¿Estás abriendo camino con tu instrumento musical?

Se podría decir en esas palabras también. Siempre trato de ser yo mismo y buscar un poco de exclusividad musical por medio de la marimba, y tal vez la tarea que va de la mano con eso es buscar los recintos adecuados, para eso, para que se aprecie.

 

¿Le gusta a la gente de Aguascalientes lo que tú haces, aprecian lo que tú haces?

Pues sin afán de auto complacencia, sí he encontrado muy buena respuesta. Me preguntan cuándo te presentas, dónde, por qué no estas programado en tal festival, por qué no te programan en tal lugar.

 

¿Qué expresas con tu música?

Busco ser yo mismo, pero sí se ven reflejados estados de ánimo, memorias emocionales. Gran parte de mi música tiene un trasfondo de vivencias que yo trato de traducir por medio de la música y de la marimba. Vivo también de tocar la batería, percusiones, pero son otra cuestión, lo de la marimba me da algo, como ser Emiliano Sandoval. Eso es lo que siento, lo que me ayuda a desnudarme prácticamente y creo que es lo que la gente va a buscar para poder sentirse identificados.

 

¿En qué momento te decidiste por la Marimba, alguien te convenció?

Es muy curioso porque resulta que, pues yo tengo 33 años y empecé a tomar clases de batería desde los 16, prácticamente ya la mitad de mi vida, las bandas de rock, es el sueño que todos los adolescentes en su momento corretean y pues llegué al Conservatorio de las Rosas que es mi alma máter, y tuve maestros con una visión muy amplia de la marimba, en específico, y pues yo he tratado de ser yo mismo, sobresalir, y no por medio del virtuosismo y cuando empecé a ver que me podía expresar por medio del timbre de la marimba, fue como un boom y empecé a desarrolla reportorio y a identificarme con mi maestro por cómo tocaba y sin darme cuenta ya tenía muchísimo repertorio. Salí de la escuela y dije, pues por qué dejar esto en el locker, si puedo seguir dando conciertos y se fue dando poco a poco que la gente me ubicara como marimbista.

 

¿Alguien te ayudó o fue un camino que tú tuviste qué explorar?

Mi familia, yo vengo de familia de promotores culturales, y siempre ha habido como esa sensibilidad hacia el arte. Soy el único músico de la familia, pero siempre por arte de mis abuelos y de mi madre que son los que se encargaron de mi educación y de mi formación. Definitivamente “si el niño quiere ser músico, pues adelante que estudie música”.

 

¿Cómo te ubicas como músico respecto de la marimba tradicional?

Vivimos en una época en la que se produce y consume muchísima música, más que en toda la historia de la música. Eso da la posibilidad de muchas fusiones. Yo no busco pertenecer como a un estilo, marimba tradicional, jazz, pop, concertista, más bien hago lo que me gusta hacer y si en algún momento alguien dice que eso suena como esto, pues no tengo problemas, pero sí busco ser lo más auténtico que se pueda. No me ubico yo dentro de la música tradicional. Ahorita predomina el minimalismo en mi material artístico, por así decirlo.

 

¿Has buscado qué lo que han hecho algunos marimbistas tradicionales en México?

He tenido la fortuna de leer música tradicional mexicana, no tengo la fortuna de conocer en persona a la familia Nandayapa, pero sé muy bien quiénes son, le sigo la pista a Tania Nandayapa, a Mario Nandayapa y siempre he respetado a don Zeferino Nandayapa, porque simplemente verlo tocar es muy influenciable, es motivante, claro que una parte de mi tiene qué ver con la música tradicional y otra con la música clásica, pero definitivamente toda esa mescolanza de cosas es lo que me ha llevado a querer hacer lo mío.

 

¿Para hacer lo tuyo has pensado en irte a otro país, a otro ambiente en el que tú quieras estar realmente?

En que no tengo definido un ambiente, lo que a mi me interesa es tocar lo mejor que se pueda en los lugares en los que más se pueda apreciar, pero realmente yo no le pongo un pero a la ciudad de Aguascalientes. Realmente no me veo como en un ambiente, como decir me veo en el Ambiente de los marimbistas de tal lado, no… Me veo en el ambiente de los músicos, digo, si me abren las puertas me sentiré afortunado, pero ahorita todo me lleva a ser auténtico.

 

¿Cómo ves a Aguascalientes, cómo describirías el estado actual de la música de Aguascalientes?

Yo lo veo muy potente. Veo muchas facetas, muy buenos músicos, he tenido la fortuna de conocer grandes músicos aquí, grandes instrumentistas y pues la verdad es que veo una oferta increíble. Por ahí de repente veo escenarios que empiezan más a trabajar con música del mundo, yo he conocido a jazzeros, músicos de orquesta, clásicos, trovadores.

 

¿A dónde va Aguascalientes, cómo lo ves en cinco años?

Si las cosas siguen como van y la cultura valorándose y la música respetándose, yo creo que Aguascalientes puede llegar a ser de los estados cumbre de la música en el país. Buenas ofertas y buenos músicos, tanto populares como clásicos, entonces sí creo que Aguascalientes tiene mucho potencial.

 

¿Qué hace que lo veas como un estado cumbre?

El hecho de que esté creciendo tanto la escena, por apoyos como el del Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura, debo decir que sí apoyan mucho, pero eso podría llevar a que realmente se respeten muchos lineamientos en las programaciones, porque sí le dan oportunidad a muchas propuestas, entonces este tipo de cosas siguen estando ahí, que vayas y te reciban de buena actitud, que las cosas sean claras. He sabido que mucha gente de fuera viene a presentarse porque les da curiosidad saber qué está pasando aquí, entonces Aguascalientes yo sentía que estaba muy centralizado, pero ahorita ya está como empezando a expandir muchísimo sus barreras, sus horizontes.

 

¿Y cómo ves a Emiliano en unos cinco o diez años?

Pues Emiliano ve definitivamente como su base Aguascalientes, yo regresé hace un par de años aquí, casi tres, pero pues definitivamente me veo más potente como marimbista, pero definitivamente la marimba está predominando mucho y la docencia, pero yo creo que es un equilibrio. Creo que la cosas se complementan bastante.

 

¿Qué sientes cuando tocas?

Cuando voy a tocar como solista, pues uno siente que la responsabilidad está dentro de uno, pero a la vez uno toca contento porque solo dependes de ti mismo, es una lucha de sentimientos encontrados… Porque unos cinco minutos antes de entrar a escena sí llega la pregunta de por qué me dedico a esto, con un manojo de nervios, pero una vez que entras llegas a un estado mental que es algo que no encuentras en ningún otro lado, no lo podría poner con palabras... Esa sensación de que vas a tocarles el corazón a las personas, porque eso espero hacer. Si lo pudiera poner en palabras yo diría que euforia, hiperactividad, a veces me siento como un león enjaulado y cuando ya dan la tercera llamada es como levantar la reja de la jaula, podría describírtela de esta manera. He aprendido con los años a disfrutar el escenario, a agradecer a la gente, a tomar las cosas más con clama, pero eso te lo da ya la experiencia, los años de estar en escena.

 

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