Entradas

Mostrando las entradas de julio, 2017

Soy biólogo musical: Iñaki Etxepare

Imagen
Entrevista al músico español           En Aguascalientes existen unas personas que no las he podido encontrar en otras partes del mundo.         La cultura lo que requiere “es un empujoncito de entidades públicas o de entidades privadas”. Por Jorge Luis Heredia Hay murmullos, movimiento, emociones que van y vienen, todos están pendientes del nacimiento de un violoncello, hay muchos testigos en la Sala Manzo de la casa de la cultura de Aguascalientes, convertida subrepticiamente en sala de partos y el padre está que no cabe de orgullo, tiene la sonrisa más grande del mundo y uno, si recién llega al lugar, lo podría identificar de inmediato, sabría que Iñaki Etxepare es el padre y José Refugio Maldonado, quien lo ha gestado por un año, está listo... De pronto en la sala se hace el silencio total y se escuchan los primeros grititos, en realidad son notas que hacen vibrar a todos y enseguida el aplauso sincero, emotivo, de cariño y solidaridad, ha nacido San Ignaxio, así, c

El trabajo hace al compositor, no la inspiración: Samuel Máynez

Imagen
Encuentro Violoncellístico de Aguascalientes          Cuando me pongo a componer soy el hombre más feliz del mundo.           Lanzó al mundo sus 90 estudios para violoncello. Por Jorge Luis Heredia Samuel Jorge Máynez Vidal, el compositor, es un hombre que raya en la timidez o incluso huraño, pero no antisocial. Inclina ligeramente su rosto hacia adelante, como si observara de reojo, como si estuviera calculando, aunque más parece perderse es su mundo del que es complicado provocar que salga, sobre todo cuando empieza a componer música. Pero sale. Parece que arrastra las palabras, pero es afable, muy atento y seguro de sí mismo. Samuel Máynez Vidal. Compositor. Está de fiesta. Y no es una fiesta cualquiera, lanza al mundo, desde la Galería Manzo de la Casa de la Cultura de Aguascalientes, sus 90 estudios para violoncello desde la editorial Boileau. Se dice sencillo, pero es el resultado de un intenso trabajo y para el trabajo Samuel no tiene tregua. Lo vi

Era la hora del recreo

Imagen
Historias de la Ciudad Jorge Luis Heredia La hora del recreo. I Gonzalo Acosta ciertamente era temido en la escuela. La directora nunca le reclamó nada y mucho menos la maestra Julia que ni con el pétalo de una rosa molestó a Benjamín, el hijo de Gonzalo. Tenía fama de ser un ex policía más cercano a los grupos delincuenciales que a la justicia. Todas las maestras lo sabían, hasta el conserje, que con Benjamín nadie se metía. Hiciera lo que hiciera, como golpear niñas, que era su deporte favorito. Benjamincito, por favor tienes que entrar a tu salón y la mayoría del tiempo Benjamincito entendía. Sin embargo, en ocasiones no había palabra que lo detuviera, ni una sola, menos un grito, so pena de tener al papá gritando, vociferando, amenazando a pecho abierto pecho. Así era. La maestra Julia utilizaba como estrategia dividir a los niños de las niñas y a las niñas las cuidaba aparte, pero nunca faltaba un descuido, por mínimo que fuera y pasaba una y otra vez. Y

Encuentro Violoncellístico, porque era necesario: Margarita Benavides

Imagen
         Etxepare y la Orquesta de Cámara de León interpretando obras de Jorge Máynez.          El ensamble CellosSSollec interpretando música de Games of the Thrones , Los Simpsons y “ Nothing else matter ”.... Por Jorge Luis Heredia Aquí no se habla de la nota roja, ni de cárteles de narcos, ni de políticos corruptos. No, aquí se habla de una de las expresiones humanas más bellas, la música, pero no con cualquier instrumento, con el cello. Se trata del teatro Morelos donde arrancó el sábado el Encuentro Violoncellístico que trajo a la inauguración a Iñaki Etxepare, un violoncellista de una ciudad Española llamada Irun que comparte con Aguascalientes, curiosamente, una profunda tradición ferroviaria. Iñaki Etxepare, cellista. Y más que un encuentro, en el teatro Morelos parecía una fiesta. Menos efusiva que la de 1914, cuando villistas y carrancistas veía una película y a alguien se le ocurrió dispararle en el mero pecho a Carranza, pero sólo agujeraron la panta

Del tejido al arte abstracto, el salto de Rosa Velasco

Imagen
          El artista tiene qué ser totalmente honesto porque si no, deja de ser arte lo que hace. Por Jorge Luis Heredia Rosa Velasco Llovió y granizó ayer en el centro de Aguascalientes y los “jefes” nunca llegaron a inaugurar la exposición de Rosa Velasco en la Ex Escuela de Cristo. “Iba a ser inauguración, pero fue apertura”, dice sonriente y atento uno de los vigilantes. Muchos lograron llegar, sin lanchas especiales ni vehículos blindados, es más, ni siquiera un paraguas de protección. Y llegaron. “Yo tengo la culpa, dice Rosa, porque cada vez que expongo, llueve. Incluso envié mi obra a Chile, no fui yo, pero llovió”. Rojo y azul Rosa Velasco platicando con la gente. Tiene una voz clara. Nítida. Fuerte. Su presencia es fuerte. Menos gente, cierto, pero más posibilidad de platicar pausadamente. De ver, de escuchar, de convivir. De saludar. Explica sus gobelinos, los tapices que, me aclara, no hace desde hace seis años cuando de pronto, así como su

Aguascalientes siempre ha estado conectado conmigo: José Castro Leñero

Imagen
        Lo que se ve es que en Aguascalientes están sucediendo cosas. Por Jorge Luis Heredia EL Beso. De José Castro Leñero Paisaje 41 de Jordi Boldó. “Aguascalientes siempre ha estado conectado conmigo, no soy ajeno”, dice en breve entrevista José Castro Leñero durante la presentación de la exposición Ciudad Ficción, anoche, en el Museo Aguascalientes. Pero cuando le pregunto sobre la intensidad cultural del estado respecto a la vida cultural de la Ciudad de México, responde de la manera correcta: “no tengo la capacidad para contestar esa pregunta con un buen criterio, llego a la inauguración y me voy un día después. Se ve que hay muchos museos y lo que se ve es que están sucediendo cosas. Puede ser que haya una oferta interesante”. José Castro Leñero tiene 64 años, nació en la Ciudad de México, ciudad plasma en movimiento en gran parte de sus obras. Y aunque sus obras hablan por él, es innegable que también es conocido por ser parte de un hecho casi insólit

Momento de debilidad

Imagen
Historias de la Ciudad Por Jorge Luis Heredia Bajo la mirada de Javier. I A las cuatro de la tarde Yamilet empezó a llorar. Era lo mismo. La misma escena repetida quinientas veces. Parecía que él tenía un problema de memoria y de palabra. Memoria porque nunca recordaba los tratos con su Yamilet y de palabra porque a fuerza de olvidos se habían vuelto vacías. Era lo mismo. Javier le había prometido llegar a las tres para cuidar a los niños y que ella pudiera asistir a la fiesta de fin de año de la chatarrera y nada, ni sus luces. La niña también empezó a llorar y el niño tenía hambre. Le pareció insoportable. De plano soltó el llanto. Con su vestido negro de fiesta, usado en cada evento importante, se apresuró a calentar la leche y recostó a su niño Javiercito en el sofá mientras colocaba su cabecita sobre sus piernas para que tomara el biberón. Su niña Lucía se entretuvo frente a la televisión con la película de La Bella y la Bestia que fácilmente había visto