Encuentro Violoncellístico, porque era necesario: Margarita Benavides

•         Etxepare y la Orquesta de Cámara de León interpretando obras de Jorge Máynez.
•         El ensamble CellosSSollec interpretando música de Games of the Thrones, Los Simpsons y “Nothing else matter”....

Por Jorge Luis Heredia

Aquí no se habla de la nota roja, ni de cárteles de narcos, ni de políticos corruptos. No, aquí se habla de una de las expresiones humanas más bellas, la música, pero no con cualquier instrumento, con el cello. Se trata del teatro Morelos donde arrancó el sábado el Encuentro Violoncellístico que trajo a la inauguración a Iñaki Etxepare, un violoncellista de una ciudad Española llamada Irun que comparte con Aguascalientes, curiosamente, una profunda tradición ferroviaria.

Iñaki Etxepare, cellista.

Y más que un encuentro, en el teatro Morelos parecía una fiesta. Menos efusiva que la de 1914, cuando villistas y carrancistas veía una película y a alguien se le ocurrió dispararle en el mero pecho a Carranza, pero sólo agujeraron la pantalla y casi matan a dos personas que se encontraban atrás. Hoy son notas musicales, pero notas que interpretadas por Etxepare se convirtieron en disparos al corazón. Personas que estaban cerca observé que estuvieron por momentos a punto de lágrimas o de plano en un mar escuchando las obras compuestas por Jorge Máynez Vidal, para violoncello y cuerdas.

Margarita Benavides, cellista.

Era como si el destino hiciera sus conjuros para que se reunieran en el mismo lugar Etxepare, la orquesta de Cámara de León y el Primer violinista, el ruso Maksin Toktalievich Smakeev tocando las obras de Jorge Máynez, quien tomó el micrófono para dirigirse a los asistentes y expresar una metáfora con la que se esforzaba para que el auditorio comprendiera lo que estaba ocurriendo: “la situación que se está viviendo hoy con el maestro Etxepare es algo realmente insólito. Yo no he visto ningún cellista, y miren que he visto muy grandes cellistas afortunadamente, pero ninguno que se atreva a hacer la proeza que el maestro está realizando…, que equivale a un deportista que se atreve a correr un maratón  de 5 mil kilómetros, después uno de diez y después uno de 15”.

Orquesta de Cámara de Léon en el Teatro Morelos de Aguascalientes.

Esperaré que les guste, dice Jorge Máynez y si no, ya saben a quién reclamarle. Hasta ahora  no parece haber reclamos, ninguno conocido, claro está. Así que allí teníamos al autor para que nos explicara su obra. “Qué mejor que un violoncello para representar sentimiento de ternura, que potencializa al máximo la capacidad expresiva, existiendo momento de nostalgia e invocación al gran Johann Sebastian Bach, combinado con música más moderna para darle cierta identidad personal” y allí nos dejó con el tercer concierto, el número 3 para violonchelo y cuerdas.

Curiosamente el teatro no estaba a reventar, la efervescencia por la cultura en Aguascalientes va in crescendo, poquito a poquito. Tampoco las autoridades, o como diría un vigilante de un museo de Aguascalientes hace tres días, a “los jefes”, no les interesó mucho el festival. Pero este festival no existía hace 4 años, hoy es parte de Aguascalientes y no nació por generación espontánea o por decreto de “los jefes”, sino por el entusiasmo y dedicación de la maestra del violoncello Margarita Benavides.

Me dice que surgió porque era necesario, pero hoy lunes, en la presentación que ofreció con el ensamble CellosSSollec en la Casa Terán, creo que fue mucho más crítica, “la razón de este encuentro con mis alumnos”. Y allí sus alumnos, ocho cellistas, interpretaron bajo su dirección obras destinadas, dice, a llegar a públicos más amplios interpretando, entre otras, Games of the Thrones, obertura miniatura de The Simpsons y una importante que incluso, dijo, por ello habían entrado al ensamble sus alumnos: “Nothing else matter” de Metallica.

No somos profesionales, dijo también, pero el púbico no dejaba de aplaudir y el aplauso obligó a los músicos a regresar. ¿Cuál? Preguntó Margarita Benavides y allí estaba escuchando Etxepare que ni tardo ni perezoso pidió como pilón “los Simpsons”, una mujer se resistió, pero qué le vamos a hacer, Etxepare era el invitado de honor. Y desgraciadamente no estuvo Jorge Máynez para preguntarle qué clase de maratón fue este.

El Encuentro Violoncellístico de Aguascalientes apenas inicia y ya aparece en el horizonte un estreno mundial, “Interpretación de los estudios  para violoncello” de Jorge Máynez el próximo jueves en la Casa Terán. Y aquí, aquí no se habla de la nota roja, se habla ni más ni menos que de este encuentro cellístico que es parte del movimiento cultural que poco a poco cimbra a Aguascalientes. Veremos.

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